Cercanos a las fiestas de fin de año, la repostería navideña se hace presente en todos lados, por eso para que conozcamos un poco más acerca de lo que comemos en esta época del año, hoy realizamos el análisis nutricional de un polvorón, en este caso de almendra. Un clásico dulce de Navidad.
Como podemos ver, las calorías de un polvorón mediano no son pocas, y esto se debe principalmente al elevado contenido en grasas, siendo en su mayoría derivadas de manteca de cerdo y en este caso, de las almendras que saborizan el dulce.
Por otro lado, un 39% de las calorías derivan de los hidratos de carbono, de los cuales, un tercio son azúcares simples y el resto, hidratos complejos derivados de la harina de trigo.
Aunque podemos encontrar grasas muy buenas como las monoinsaturadas propias de las almendras y en parte, de la manteca de cerdo, la realidad es que el polvorón constituye una fuente concentrada de energía debido a la cantidad de grasas y azúcares que posee, sin aportar cantidades apreciables de proteínas y fibra.
Por eso, nos podemos dar el gusto de disfrutar un polvorón, pero procuremos no consumirlo en exceso sino reservarlo para saborear como un dulce típico de Navidad.
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Imagen | Xurde
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