Lesiones deportivas: ¿Qué me espera en las sesiones de Fisioterapia? (y III)

Lesiones deportivas: ¿Qué me espera en las sesiones de Fisioterapia? (y III)

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Lesiones deportivas: ¿Qué me espera en las sesiones de Fisioterapia? (y III)

En entradas anteriores hemos hablado sobre temas generales que pueden ser interesantes para aquellas personas que realicen ejercicio y, por una lesión, tengan que acudir a sesiones de fisioterapia. Continuamos la serie sobre este tema.

Hemos hablado sobre cómo acceder a las sesiones de Fisioterapia y de la importancia del diagnóstico fisioterápico así como de la reevaluación periódica para poner los objetivos del tratamiento. También hemos destacado la necesidad de ser parte activa del tratamiento, y de no dejarse llevar por las prisas pues, en salud, no hay recetas mágicas y todo necesita tiempo y esfuerzo para conseguirse.

En esta ocasión vamos a destacar la importancia tener bien claro en qué pueden servir las sesiones de fisioterapia, cómo puede ayudar el fisioterapeuta y factores importantes a tener en cuenta para una mejor recuperación.

Las sesiones de fisioterapia no son milagrosas

Hay quien acude a fisioterapia con la idea de que con algún masaje, movilización, ejercicio, movimiento... Se va a recuperar perfectamente, se va a aliviar el dolor y no va a necesitar nada más.

Es más, incluso a veces, por desgracia, se deja la fisioterapia casi como último recurso: cuando todo lo demás ha fallado, y esto no es correcto.

A ver, en ocasiones puede haber mejoras muy importantes con pocas sesiones, pero depende mucho del tipo de lesión. Lo normal es que una lesión o dolencia tenga mejor pronóstico si el tratamiento de fisioterapia se inicia de forma precoz.

Ante una lesión al hacer ejercicio, es más eficaz la fisioterapia cuando notas una molestia que aparece al realizar ejercicio o después, que acudir cuando ya no puedes casi ni andar porque llevas meses, o años, con el problema.

Masaje Fisioterapia

La fisioterapia empieza por uno mismo

Si bien acudir el fisioterapeuta puede ser muy importante, tanto a nivel preventivo como para tratar lesiones, hay que tener en cuenta que tenemos que ser activos para que el tratamiento funcione adecuadamente.

Ir al fisioterapeuta a tumbarse en la camilla es, o debería ser, algo del pasado. Si, hay parte del tratamiento que será pasiva (estiramientos, movilizaciones, masaje, exploración, aplicación de aparatos de electroterapia...) pero la parte más útil del tratamiento será la activa: los ejercicios, consejos y pautas que nos de el fisioterapeuta, tanto para hacer en consulta como para seguir haciendo en casa.

De esta manera se mejoran los resultados y se mantienen en el tiempo. Es una inversión que hay que hacer en uno mismo, y no me refiero a términos económicos únicamente, sino que hay que hacer un esfuerzo por seguir las pautas que nos indiquen, pues es en beneficio de conseguir la mejor recuperación y evitar recaídas.

En la imagen de cabecera vemos pesas, un balón de Pilates, zapatillas deportivas... Eso se parece más a lo que se necesita en muchos casos para mejorar que lo que se realiza en la segunda imagen, la del masaje pasivo y nada más.

Acudir a profesionales formados en la materia

Además de, lógicamente, acudir a profesionales que cumplan con los requisitos académicos y legales para ejercer la fisioterapia (ya sea en España o en el país que corresponda, según la legislación existente) es recomendable acudir a profesionales que estén formados y/o tengan experiencia en la lesión en cuestión.

En España no hay especialidades en fisioterapia, como las puede haber en medicina o en otras formaciones, pero cada profesional realiza una capacitación después de la formación universitaria y tiene una experiencia, por ejemplo, en lesiones de hombro, rodilla, lesiones deportivas, prevención de lesiones...

Un buen fisioterapeuta valorará el caso y, ya sea en la primera sesión o en las siguientes (si no hay la mejora esperada) no tendrá miedo de derivarte a otros profesionales, ya sean de otras ramas sanitarias o a otros colegas fisioterapeutas formados de manera específica en la lesión en cuestión.

En definitiva, la fisioterapia es una ayuda eficaz tanto para prevenir como para tratar lesiones, pero hay que tener claro qué se puede conseguir y qué no, y también que el papel activo del sujeto es fundamental para conseguir los resultados esperados.

Y vosotros ¿cómo ha sido vuestra experiencia con tratamientos de fisioterapia?

En Vitónica | Cinco ideas para aprovechar mejor las sesiones de fisioterapia

Imágenes | Pixabay (libres de derechos)

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